En resumen, la imagen térmica es el proceso de usar la temperatura de un objeto para producir una imagen. Las cámaras termográficas trabajan detectando y midiendo la cantidad de radiación infrarroja que es emitida y reflejada por los objetos o la gente para hacer visualmente la temperatura. Una cámara térmica hace uso de un dispositivo conocido como un microbolómetro para recoger esta energía apenas fuera del alcance de la luz visible, y la proyección de nuevo al espectador como una imagen claramente definida.